Tarta Sacher con Almendras
¿Buscas un receta que se pueda hacer con Almendras?
Sigue estos pasos te enseñaremos a hacer la mejor tarta de almendras que hayas probado!
El chocolate es un ingrediente extraordinario, y no solo por ser tan delicioso y deleitar el paladar de todos si no lo fácil que es hacer sorprendentes recetas a partir de este. Hoy haremos una tarta a partir de este y exquisitas almendras.
Ingredientes
- Ingredientes para el bizcocho y el relleno:
- 100 gr de mantequilla.
- 100 gr de almendras peladas.
- 6 huevos tamaño L.
- 100 gr de azúcar glas.
- 100 gr de azúcar blanco.
- 65 gr de cacao puro en polvo.
- 100 gr de harina de trigo.
- 10 gr de levadura química (tipo Royal).
- 300 gr de mermelada de damasco.
- Ingredientes para la cobertura de chocolate:
- 100 ml de nata para montar.
- 130 gr de chocolate para fundir.
- 20 gr de mantequilla sin sal.
- 2 cucharadas soperas de agua.
- Lo primero que vamos a preparar es el bizcocho. Para ello comenzamos dorando las almendras, puedes hacerlo poniéndolas en una bandeja de horno y a 150ºC durante unos 15 minutos vigilándolas que no se quemen, o más rápido en una sartén como hemos hecho nosotros, apenas 5 minutos a fuego medio y removiéndolas para evitar que se doren demasiado.
- Con una picadora las trituramos y las dejamos como si fuera una harina gruesa para que se mezcle perfectamente con los demás ingredientes. Reserva.
- Precalienta el horno a 170ºC mientras preparas el bizcocho.
- En un bol grande mezcla la mantequilla (que deberá estar en textura pomada, es decir, sácala al menos 30 minutos antes de la nevera para que sea fácil trabajar con ella) y el azúcar blanco, y bátelo bien hasta que la mezcla sea densa y blanquecina y el azúcar se haya integrado con la mantequilla.
- Ahora vamos a montar las claras. Los huevos deberán estar a temperatura ambiente, por lo que sácalos de la nevera al menos media hora antes de comenzar a manipularlos. Separa las yemas de las claras dejando las claras en un bol grande y móntalas con unas varillas manuales o eléctricas. Cuando estén casi montadas añade el azúcar glas y sigue con el proceso, procurando que no queden muy duras.
- Forra un molde redondo con papel de horno (si es de silicona, no necesitas el papel), y echa la mezcla del bizcocho. Estas cantidades son ideales para un molde de 22cm que suele ser lo estándar, ya que si es más grande te quedaría demasiado bajo.
- Introduce el molde en el horno a altura media y hornea alrededor de 35 minutos. Para comprobar si está listo, introduce un palillo en el bizcocho, y si sale limpio es que ya está listo. Si no, déjalo unos pocos minutos más pero vigilando no pasarte para que no pierda jugosidad.
- Sácalo del horno y déjalo enfriar 10 minutos dentro del molde. Después desmóldalo y déjalo enfriar completamente para seguir con el siguiente paso.
- Pon dos palillos en el bizcocho como puedes ver en la fotografía, así te servirán de guía para cuando tengas que volver a unirlo. Divídelo en dos partes y darle la vuelta al bizcocho, así quedará visible la parte de abajo que será más recta y lisa.
- Ahora que tienes dos capas, pinta la de abajo con la mermelada de albaricoque y vuelve a colocar la capa de arriba encima haciendo coincidir los palillos, y aplastando cuidadosamente para que las dos partes queden unidas. Hay quien recorta los bordes para que queden perfectamente definidos, pero esto es recetas de… ¡escándalo! y aquí priorizamos el sabor y el ahorro de tiempo, y nos parece un desperdicio el cortar los bordes solo para dejarla más bonita.
- Ahora vamos con la cobertura de chocolate, que es una parte con cierta complejidad pero también divertida, y además para los más chocolateros es un auténtico placer «repelar» ese chocolate sobrante que escurre la tarta.
- Pon en un cazo la nata, y cuando hierva aparta del fuego y añádele el chocolate ligeramente troceado y la mantequilla. Con una lengua de cocina remueve bien hasta que el chocolate se disuelva por completo (todo esto hazlo rápidamente para que la mezcla siga caliente). Incorpora las 2 cucharadas de agua, es el truco definitivo para que la cobertura fluya por la tarta y quede bastante liso.
- Ten preparado el bizcocho encima de una rejilla y ésta sobre una bandeja porque el chocolate va a hacer su aparición.
- Vierte por encima la cobertura de chocolate directamente del cazo y procura bañar todo el bizcocho de forma que no tengas que alisarlo ni ayudarte con una cuchara ni nada, simplemente se irá adaptando a la tarta. Procura que los bordes queden también cubiertos de chocolate, y para esto quizás si te puedas ayudar un poco de una cuchara.
- Déjala enfriar al menos 30 minutos (aunque esto depende de la estación del año), hasta que veas que se ha solidificado la cobertura.